Las razones...

La razón para escribir estas palabras es simple, querer compartir este proceso, largo y complejo, con otras personas que estén buscando una solución a años de dietas sin resultados positivos... en mi caso fueron 12 años batallando contra los kilos y, sobre todo, contra las ganas de seguir comiendo... ésta es mi historia.

martes, 28 de febrero de 2012

4 semanas

Hace exactamente 4 semanas que me operé.  El proceso de recuperación ha sido infinitamente mejor de lo que yo esperaba, a pesar de tener algunos (pocos) episodios en que he tenido que ir al baño y "devolver" lo ingerido, pero ha sido fundamentalmente cuando he intentado comer algo más sólido como quesillo molido o clara de huevo ídem.

En el resto de los aspectos todo pero TODO ha estado super bien, me sacaron los parches a la semana de la cirugía que es por laparoscopía, así es que las cicatrices son chiquititas y delgaditas.  Esa misma semana me metí a la piscina, nadé, empecé a hacer algo más de ejercicio además de las típicas caminatas.

En cuanto a la alimentación, la primera semana se me hizo lenta, sólo líquidos, leches descremadas blancas o con sabor, agua, té, jugos y caldo.  Pero cuando empecé con las papillas el tiempo pasó volando y ya sólo me queda la próxima semana de papillas y puedo pasar a la sgte. etapa, que son picados igual que los de los niños.  Creo que lo que más me ha costado es tomar agua entre comidas.  Estoy media deshidratada la verdad y eso es porque no se puede tomar agua media hora antes ni media hora después de comer, el estómago no tiene capacidad para resistir ambas cosas al mismo tiempo.  El problema se genera porque uno se demora muuuuuuuuuuuuuuuuucho en comer y no me queda tanto tiempo entre medio pa tomar agua.  No sé si bien o mal pero yo he priorizado comer.  El jueves tengo control con la nutricionista y le preguntaré cómo mejorar eso.  Cuando me he sentido mal, por ejemplo ha sido porque no dejé de tomar agua media hora antes, entonces como y no tengo espacio, la sensación es muy desagradable, te sientes atorada y duele el pecho, como cuando se atasca un pedazo gigante de membrillo, empeizas a salivar y ya sabes que lo único que te aliviará es vomitar.  Ayer me sentí mal por eso mismo, preferí comer clarita de huevo pasada por el colador (imagínense!!!) pero había tomado agua antes.  Me atoré heavy y fui al baño como 3 veces, encluso en el camino a recoger a una amiga tuve que parar también, o sea no te alivias hasta que todo lo que te está ahogando sale, esto es muy importante, hay que tener paciencia y esperar hasta que uno de verdad esté completamente aliviada de esa sensación de opresión en el pecho.

Aparte de esos escasos episodios el resto ha sido fácil la verdad.  Creo que lo que más me ha tentado son los aromas, el del pan calentito, el del pepino en la ensalada, cosas así, pero como super bien con todo el mundo alrededor devorando delicias y no tengo hambre en lo más mínimo, entonces esa parte no me ha complicado pa ná.

Creo que ya he bajado más de 10 kilos, pero como mi pesa no es la misma que la del doc no estoy segura.  Lo que si está claro es que mi ropa normal me queda suelta y la que no me cabía me está entrando y quedando bien, así que se nota heavy el cambio.  

Ahora tengo que aplicarme con el ejercicio porque esta baja tan drástica me dejará la piel y los musculitos muy mal parados si no hago algo para tonificar.  Es últil comprarse cremas y hacerse masajes pero el doc fue muy claro, lo más importante es el ejercicio.

Hasta aquí el reporte de los avances, que me tienen muy contenta debo decirlo... lo mejor de todo es que no me he sentido sin ánimo ni nada, ando igual que siempre... creo que hasta más alegre!!!!  

No hay comentarios:

Publicar un comentario